Obtén un seguro para curador de museos, galerías de arte y bibliotecas aquí

Aunque pueda sonar extraño, un curador no tiene nada que ver con la medicina o salud de las personas. Esta persona se encarga de mantener y preservar todos los registros y datos dentro de alguna institución histórica. Además puede desempeñar otros cargos en su misma zona laboral.

Entre las responsabilidades que tiene un curador está promover las investigaciones sobre objetos de colección de museos, galerías y bibliotecas, realizar sesiones de los objetos coleccionados, participar activamente en la restauración de piezas valiosas, y más. Para poder desempeñar estas y otras actividades, el curador debe ser una persona muy culta y conocedora de la cultura universal.

Un detalle importante es su amplio rango de zonas laborales, lo cual incrementa no solo sus conocimientos, sino también los riesgos personales. El curador deberá contar con un seguro de accidentes personales si no quiere ser parte de la historia que estudia con decoro.

Las compañías aseguradoras ofrecen cotizaciones confiables con montos fijos de pago. Estos van desde anuales hasta mensuales, semanales y por horario laboral de 24 horas.

En caso de un accidente laboral donde ocurra una invalidez parcial o total, sea permanente o no, está la cotización ideal presente. En ella se establecen los pagos de la internalización, así como de los gastos médicos y farmacéuticos.

Un curador debe velar por su seguridad, así como vela por la seguridad de cada pieza que conforma el museo, galería de arte, o biblioteca que cuida. En ellas se alberga la historia del mundo, pero el curador es quien puede mostrarla de la mejor manera posible.

Por ello, si llega a ocurrir el peor de los casos donde la persona fallece, está la cotización por muerte accidental comprobable. Está debe haber ocurrido en horario laboral, y dentro de alguno de los establecimientos mencionados. Esta cotización incluye los gastos del sepelio o cremación.