Protégete contra los imprevistos; contrata el mejor seguro para propietario de estacionamiento, con deberes de oficina solamente
Las compañías de seguro han pensado en estos empresarios. Por eso tienen pólizas que se adaptan a las necesidades de ellos
Los automóviles cambiaron el mundo. En poco espacio, sin tracción animal, y con nafta, permiten mover personas, animales, cargas y mercancías a gran velocidad por las calles y autopistas de la ciudad y el campo.
Es inevitable que todo el mundo quisiera un automóvil. Es inevitable que algo tan útil se convirtiera en una necesidad. Pronto los centros de las ciudades y los lugares mínimamente comerciales se llenaron de autos y se volvió imposible aparcarlos.
A partir de ahí los nuevos edificios y establecimientos se diseñaron para alojar gran cantidad de autos en los estacionamientos, y también surgieron estacionamientos independientes en parcelas de zonas densamente pobladas de las ciudades, que estaban baldías y que pudieron ser bien aprovechadas de esta forma.
El propietario de estacionamiento posee un pequeño tesoro. Su establecimiento ha generado tanta confianza que ahí son confiados los autos de otros para ser cuidados mientras sus dueños hacen todo tipo de trabajos y ocupaciones.
Este empresario está expuesto en su lugar de trabajo a muchos tipos de accidentes. Aunque permanezca sentado en su oficina, una mala postura puede hacer que de un mal paso y que se caiga, provocándole fracturas o hematomas.
Incluso cabe la mínima posibilidad de que sea ligeramente atropellado por un automóvil en neutro. Que la probabilidad sea mínima no significa que no pueda ocurrir.
Las compañías de seguro han pensado en estos empresarios. Por eso tienen pólizas que se adaptan a las necesidades de ellos. Incluyen servicios como el de cobertura total o parcial de gastos médicos, farmacéuticos y hospitalarios, que reintegrará cada peso que el propietario de estacionamiento gaste en caso de que un accidente laboral le haga terminar el día en una clínica.
También incluyen cobertura de invalidez total o parcial, que le dará una indemnización al propietario en caso de que un accidente lo deje por un tiempo o permanentemente inválido. Por último, la cobertura de muerte accidental pagará los gastos funerarios en caso de que el accidente sea tan grave que termine de forma fatal.