Predicar y practicar también con la seguridad; seguros para sacerdote
Los sacerdotes deben contar con una póliza de seguro de accidentes personales para aquellos casos en donde más lo necesiten
Para muchas personas, la espiritualidad es la piedra angular de sus vidas. Aquellas que desean acercarse más, toman el camino del sacerdocio que los instruye en distintos aspectos de la vida.
Un sacerdote es generalmente considerado como una persona dedicada a ser el intermediario entre cada miembro de una comunidad religiosa, como la católica. Dicha comunidad emplea las partes religiosas y divinas como un todo, y permiten al sacerdote realizar actos específicos.
Estas personas se someten a un estilo de vida muy estricto, y deben evitar a toda costa realizar actos que no estén dentro de los parámetros de la comunidad religiosa. De acuerdo con distintas enseñanzas religiosas, el sacerdote debe ser la imagen de la paciencia, la pureza y la bondad del ser humano.
Esta tarea no siempre es sencilla, puesto que son seres humanos que han de tener ciertas fallas. Pero incluso dentro del estilo de vida del sacerdocio, ellos pueden sufrir accidentes durante su desarrollo espiritual y laboral.
Ya que toman parte en las discusiones entre distintos entes religiosos, deben realizar encargos y acciones que pueden herirlos físicamente. Al mismo tiempo, deben estudiar constantemente y el cansancio puede hacer acto de presencia.
Los sacerdotes deben contar con una póliza de seguro de accidentes personales para aquellos casos en donde más lo necesiten. Ellos deben sentir que pueden continuar en su camino espiritual sin preocuparse por los gastos médicos o de las medicinas farmacéuticas.
Los servicios que ofrecen las pólizas de accidentes personales para sacerdotes son los siguientes: cobertura en caso de invalidez total o parcial, ocurrido durante las horas laborales bajo estrés o cansancio extremo. Cobertura por muerte accidental que pueda ser comprobada, así como los gastos del sepelio.
Estos contratos se presentan en modalidades mensuales o anuales, dependiendo del caso y la necesidad del sacerdote. Muchas compañías de seguros ofrecen distintas opciones de pago, como los contratos anuales de la póliza.