Seguro personal para limadores, pulidores y supervisores en fábricas de metales
El trabajador de estas fábricas metálicas debe cotizar y contratar una póliza de seguro que abarque estos accidentes y riesgos relacionados a su práctica laboral
La fábrica de metal es una parte del sector industrial que se dedica a la transformación de las materias primas minerales metálicas a usos industriales, para fabricar un gran número de bienes o productos que se emplean en la vida diaria: agregados para la industria del concreto y el hormigón, o productos de la industria química y electrónica, entre otros.
El limador es aquella persona que opera maquinarias y herramientas limadoras a los fines de limar los productos metálicos, es decir, perfeccionar el producto alisando al mismo, suavizándolo donde sea necesario, y facilitando que tenga la forma que debe tener.
El pulidor es aquella persona que se encarga de manejar maquinarias y herramientas pulidoras, las cuales se emplean de forma similar a las limadoras, para suavizar y perfeccionar la forma definitiva del producto.
El supervisor es esa persona que supervisa las operaciones y procedimientos industriales de las fábricas de metales. Es alguien organizado, responsable, coordinado, comunicativo, con liderazgo y capacidad de actuar bajo presión y tomar decisiones en el momento en que deben ser tomadas.
Los factores de riesgo de estas profesiones propias de las fábricas de metales vienen en la forma de lesiones, atrapamientos, mutilaciones, y daños de todo tipo, como consecuencia del uso, así como de accidentes, con las maquinarias, herramientas y materias primas de la industria del metal.
Por todo esto, el trabajador de estas fábricas metálicas debe cotizar y contratar una póliza de seguro que abarque estos accidentes y riesgos relacionados a su práctica laboral, y para ello las empresas aseguradoras han diseñado seguros contra accidentes personales para fábricas metálicas.
Por tal motivo, este seguro contra accidentes personales le ofrece soporte para un excelente tratamiento clínico en caso de ser necesario, y también lo compensará financieramente por las repercusiones de una inmovilización laboral producida por accidente en el trabajo. No temas más a los percances durante tu actividad formal, e invierte en tu seguro.
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