Libera tu estrés, cotiza tu seguro de masajista
Los masajistas pueden sufrir desgaste muscular, ya que son ellos quienes manipulan los músculos de otras personas durante sesiones largas y extenuantes
Cuando las personas se sienten cansadas o agotadas físicamente, tienen dolores musculares, o necesitan relajarse, lo mejor es recibir un masaje. Estos son tratamientos terapéuticos que trabajan con los músculos del cuerpo, estirando y relajándolos para aliviar ciertas partes del mismo.
Un masajista es quien realiza un tratamiento con cinesiterapia pasiva, o masajes pasivos. Estas personas deben ser expertas en la anatomía del cuerpo, así como en el uso de herramientas terapéuticas que mejoren el estado natural de la persona.
Para los masajes terapéuticos requieren de un estudio profundo del cuerpo, que puede llevar al masajista al mismo nivel de un kinesiólogo o fisioterapeuta. Estos masajes pueden atraer riesgos que muy pocas personas conocen.
Durante una sesión de masajes se suelen emplear aceites y velas aromáticas que pueden producir incendios dentro del cuarto, producto del humo o los mismos aceites. Además los masajistas pueden sufrir desgaste muscular, ya que son ellos quienes manipulan los músculos de otras personas durante sesiones largas y extenuantes.
Estos expertos del cuerpo deben contar con un seguro de accidentes personales que los cubra en casos excepcionales o poco comunes. Los servicios que ofrecen las pólizas de accidentes personales para masajista son los siguientes: cobertura en caso de invalidez total o parcial, ocurrido durante los las horas laborales en sesiones.
Otro servicio con el que cuentan es la cobertura por muerte accidental, que pueda ser comprobada, así como los gastos del sepelio. Estas personas devuelven la comodidad de vivir a sus clientes, por lo que no deben ser ajenos a la salvación que ofrece una póliza personal.
Estos contratos se presentan en modalidades mensuales o anuales, dependiendo del caso del masajista. Sin embargo, algunas compañías de seguros ofrecen distintas opciones de pago, como lo son los acuerdos o contratos anuales de la póliza.