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La salud puede reponerse, seguro para repositor de supermercado

El cansancio y la fatiga hacen acto de presencia y los repositores van a necesitar una póliza de seguro personal que los ayude en estos casos

Entre las distintas ramas laborales que hay en los supermercados, se encuentra la de repositor. Este es un empleado encarado de colocar los productos o mercancía en los estantes o expositoras para su pronta venta.

Al ser los encargados de todas las mercancías y productos que el supermercado vende, deben saber bien como posicionarlas. Esto se refiere a colocar los objetos de forma que sean llamativos para el público, además de fácil de seleccionar y llevar.

También llamado reponedor, este empleado debe transportar la mercancía desde los almacenes o camiones hasta dentro del supermercado. Cada embalaje que lleve debe ser depositado con cuidado, pues ahí está la ganancia de la compañía.

Para estos trabajadores, la coordinación y el orden lo es todo. Cada embalaje debe ser usado con cuidado, y abierto con herramientas filosas que pueden producir un accidente. En varias oportunidades, ellos tendrán que cargar personalmente con los embalajes.

Esto puede producir daños en la columna, los músculos, el pecho, así como en otras partes del cuerpo. Esto sin mencionar las largas horas laborales nocturnas y hasta diurnas de madrugada. El cansancio y la fatiga hacen acto de presencia y los repositores van a necesitar una póliza de seguro personal que los ayude en estos casos.

Los servicios que ofrecen las pólizas de accidentes personales para repositor de supermercado son los siguientes: cobertura por muerte accidental que pueda ser comprobada y gastos del sepelio, así como cobertura en caso de invalidez total o parcial, ocurrido durante las horas laborales.

Cada gasto médico o farmacéutico que requiera el cliente va a estar incluido en la póliza. Generalmente los contratos de póliza se presentan en modalidades anuales o mensuales, dependiendo del caso y la necesidad de cada cliente.

Esto es para ayudar al cliente al momento de no contar con el nivel económico que demanda un seguro de accidentes personales.